domingo, septiembre 28

mama comenius (V)

Después de dejar a Marta embarcada, nos hemos ido a dar una vuelta al rastro. Llovía y ya no hay mucha diferencia entre ese mercadillo y el martes así que hemos vuelto a casita pronto. Hace un momento he llamado al tfno. fijo de Isabelle, la profe donde se ha quedado Marta esta noche. Ya no tiene fiebre y aunque cansada, está cómoda. Va a vivir con una asistente inglesa en un apartamento del instituto. El trabajo de Marta será ser ayudante de español y de ingles. Está contenta. Lo he notado. Ya estoy deseando poder tener una conexión vía messenger o skipe con ella. Por cierto... Llevaba 2 kilos de sobre-equipaje que estábamos dispuestos a pagar hasta que nos dijeron que eran 40 € (5 por kg de exceso más la sanción); lo indignante es que luego nos ha dicho Marta que solo iban en el avión 28 personas. ¿No podían haber sido más flexibles? Bueno, son las reglas.
Mañana a Salamanca. Aquí te pillo y aquí te... Paula ha aprobado selectividad con buena nota y tiene plaza en la facultad que desea. Hay que espabilarse para hacer el papeleo, buscar piso, ufffff, menudo día nos espera.
Dentro de nada, otra vez somos dos.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

A mí me falta mucho todavía para llegar a esa sensación, pero tiene que ser algo hermoso y sobrecogedor a la vez (supongo), al menos son las emociones que me imagino en un momento así.
Enhorabuena por esas hijas

puertoblazquez@gmail.com dijo...

Pues sí Koldo. Las sensaciones son indescriptibles; de todos los colores y todos los sabores. Lo importante, saber quedarse con lo agradable y asumir que tienen que ser ellas las que elijan, se equivoquen o no y aprendan.
Besos, Puerto